Se conocieron detalles de la situación presentada ayer en la Clínica Medellín y en la cual fue asesinado el urólogo Juan Guillermo Aristizábal y su asistente resultó herida. El homicida del médico ya habría intentarlo agredirlo.
Uno de los compañeros de urología, el médico Juan Carlos Rincón comentó que esta situación ya era reiterativa.
«Memo operó a un paciente de una circuncisión, un paciente siquiátrico y difícil, el hombre comenta que después de la cirugía perdió la calidad de vida en todos los aspectos y en varias ocasiones había amenazado a Memo, tanto que Memo ya había puesto el denuncio, y casualmente el paciente era atendido por un psiquiatra en el piso de abajo y cada que iba a la cita pasaba donde Memo y la secretaria que estaba siempre con él, cinco años con Memo, pues le avisaba a Memo y cerraba la puerta, era una cosa reiterativa», indicó el médico Rincón.
Según comentó, el jueves, la secretaría que conocía del caso no estuvo laborando , «con la mala suerte que el día de hoy (ayer) la secretaria de siempre, tenía un cita médica, entonces había un reemplazo que no conocía la situación y por eso llegó el tipo, pudo entrar y mató a Memo y luego se suicidó», narró el médico.
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La situación pone en la lupa la seguridad que tienen las clínicas en la ciudad, pues carecen de protocolos de seguridad que permitan evitar que pacientes ingresen armas.
«En esta profesión estamos por cualquier motivo avocados a cualquier peligro y a cualquier enemigo en cualquier momento», indicó uno de los compañeros del médico asesinado ayer y enlutó al gremio de la salud.
