El proyecto busca garantizar el derecho a la salud y mejorar el sistema, pero ha generado controversia y oposición.
El proyecto tiene mensaje de urgencia, pero aún no se ha iniciado el debate en las comisiones séptimas, donde se deben votar más de 100 proposiciones.
El proyecto podría ser aprobado, hundido, modificado o archivado, dependiendo de lo que decida el Congreso y el Gobierno. Esto es lo que pasaría en todos y cada uno de los escenarios:
Que el proyecto sea aprobado en las comisiones séptimas y pase a las plenarias de Senado y Cámara, donde deberá superar otros dos debates antes del 20 de junio, fecha límite para que se aprueben las leyes ordinarias en esta legislatura.
Que el proyecto sea hundido en las comisiones séptimas por falta de consenso o de quórum, lo que obligaría al Gobierno a presentar un nuevo proyecto en la próxima legislatura o a convocar un periodo extraordinario para continuar con el trámite.
Que el proyecto sea modificado sustancialmente en las comisiones séptimas, lo que implicaría que el Gobierno tendría que decidir si acepta o no los cambios o si retira el proyecto y presenta uno nuevo.
Que el proyecto sea archivado por solicitud del Gobierno, lo que podría responder a una estrategia política para evitar un desgaste innecesario o para buscar un mayor respaldo social y parlamentario.
