Este sábado 2 de diciembre se cumplen 30 años de la muerte de un hombre que marcó la historia de Colombia y que después de tanto tiempo sigue siendo recordado por muchos ciudadanos. Se trata de Pablo Escobar Gaviria, el narcotraficante que aterrorizó al país durante la década de los 80 y 90.
Nacido en la vereda El Tablazo de Rionegro el 1 de diciembre de 1949. “El Capo” es considerado uno de los más crueles asesinos y terroristas de todos los tiempos, dejó un legado de violencia y sevicia que aún impacta a la sociedad.
Según las autoridades colombianas, Escobar podría ser responsable de hasta 5.000 homicidios, incluyendo magnicidios de candidatos presidenciales como Luis Carlos Galán, Rodrigo Lara y el procurador Carlos Mauro Hoyos, así como miles de colombianos que cayeron víctimas de sus actos terroristas. Además, se estima que ordenó el asesinato de 500 policías, ofreciendo una recompensa de 2 millones de pesos por cada cabeza.
Tres décadas después de su muerte, los niveles de sevicia y crueldad demostrados por Pablo Escobar siguen impactando y generando reflexiones sobre la tragedia que vivió Colombia durante su reinado de terror.
Su muerte ocurrió un día después de haber cumplido 44 años. Escobar fue arrinconado por la Fuerza Pública y por las amenazas que pesaban sobre su familia. En la tarde del 2 de diciembre de 1993 el Bloque de Búsqueda rodearon una casa del barrio Los Olivos de Medellín Al momento de ser descubierto en su escondite, lo cuidaba solamente un sicario, Álvaro de Jesús Agudelo (El Limón), el cual murió abatido cuando se enfrentó con los agentes que ingresaron a la vivienda donde se ocultaba el capo.
Al verse acorralado, Pablo Escobar intentó escapar por los tejados de las casas aledañas y recibió tres tiros. El primer de los tres disparos que lo impactaron procedió del fusil de un agente que cubría la salida posterior de la casa. Lo recibió cuando intentó volver sobre sus pasos, en el tejado, y fue alcanzado en la parte de atrás del hombro por una bala que se alojó entre los dientes 35 y 36, según el dictamen de los forenses.
