En un gesto inusual, el presidente Gustavo Petro y el expresidente Álvaro Uribe se sentarán esta tarde a tomar un «tinto» en el Palacio de Nariño para abordar las crecientes críticas y controversias en torno a la reforma a la salud. La iniciativa, actualmente en trámite en la Cámara de Representantes, ha enfrentado obstáculos y desacuerdos, generando aplazamientos.
El propósito del encuentro es buscar consensos y superar las diferencias en el proceso legislativo. Mientras el Centro Democrático ha anunciado su intención de romper el quórum, Petro busca evitar mayores retrasos. Ambos líderes estarán acompañados por destacados miembros de sus respectivos equipos, así como representantes de la bancada del Pacto Histórico.
Uribe, al aceptar la invitación, condicionó su participación a la suspensión del trámite de la iniciativa. El ministro del Interior expresó optimismo y destacó la importancia de un debate democrático para encontrar puntos en común y definir las diferencias. Se espera que temas cruciales, como la transición al nuevo sistema de salud y el manejo de recursos, sean abordados en la reunión.
La sociedad y diversos sectores, incluidos representantes del gremio de la salud, estarán atentos a los resultados de este encuentro que podría tener un impacto significativo en el futuro de la reforma a la salud en Colombia.
