La familia Álvarez Suárez recibió los restos de Yisenia tras más de dos décadas de angustia e incertidumbre. Yisenia Patricia, desaparecida en 1998 junto a su hermana Sandra Milena, ha «regresado» a casa, aunque no de la manera que su familia esperaba.
El 5 de julio pasado, en una ceremonia cargada de emociones en La Unión, Antioquia, los restos de Yisenia Patricia fueron entregados a sus seres queridos. La Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) logró recuperar su cuerpo en 2022 del cementerio de Granada, poniendo fin a 26 años de búsqueda.
Lina Álvarez Suárez, la hermana menor que tenía apenas 10 años cuando ocurrió la desaparición, compartió sus recuerdos: «Teníamos la esperanza de que de pronto llegaran vivas. Decíamos: ya es momento de que nos hubieran buscado». Sus palabras reflejan la dolorosa espera que ha marcado a la familia durante más de un cuarto de siglo.
La historia de las hermanas Álvarez Suárez es un recordatorio de las heridas que el conflicto armado ha dejado en Colombia. Yisenia Patricia y Sandra Milena, de 18 y 14 años respectivamente, salieron de su casa en la vereda Buenavista el 1 de junio de 1998, rumbo al pueblo. Nunca regresaron.
Lina evoca con cariño los recuerdos de su infancia junto a sus hermanas: «Les gustaba coger moras cerca de la finca». Describe a Patricia como una mujer hermosa que amaba las faldas y las botas de cuero, mientras que Sandra era más extrovertida y le encantaba «pintoretiarse».
La desaparición dejó una herida profunda en la familia, especialmente en Rosalba Suárez, la madre. «Mi mamá nunca volvió a tener alegría, eso la acabó totalmente», relata Lina. Tristemente, Rosalba falleció en 2012 sin poder reunirse con sus hijas.
A pesar de haber encontrado a Yisenia Patricia, la búsqueda no ha terminado. El paradero de Sandra Milena sigue siendo un misterio. Lina y su hermana Sirley continúan la lucha que su madre comenzó, manteniendo viva la esperanza de un día poder cerrar completamente este doloroso capítulo familiar.
