En una entrevista exclusiva con El Tiempo, el comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Bonilla, aborda las acusaciones contra el general Luis Ospina, quien presuntamente utilizó la inteligencia militar para seguir al profesor de inglés de su esposa. El caso, que ha desatado controversia, revela un nuevo escándalo de chuzadas que pone en entredicho la rectitud del Ejército Nacional.
El general Bonilla asegura que la ley debe ser respetada por todos, sin importar el rango militar, y subraya que las acciones personales no deben comprometer la integridad y credibilidad de las Fuerzas Militares. A pesar de la confianza expresada en los soldados, el episodio evoca anteriores escándalos de chuzadas, como el “Niñera gate”, recordando la necesidad de mantener la transparencia en las instituciones de seguridad del Estado.
El Ejército emitió un comunicado respaldando las acciones del general Ospina, argumentando que el uso de contrainteligencia estaba justificado para proteger la seguridad del comandante y su familia. Sin embargo, las investigaciones de la Procuraduría y la Fiscalía determinarán si hubo abuso de funciones y si las acciones del general se ajustaron a los principios éticos de las Fuerzas Militares.
