Un día como hoy, Bolívar renunció a la presidencia de la Gran Colombia

El 27 de abril de 1830, Simón Bolívar, el Libertador de América, renunció oficialmente a la Presidencia de la Gran Colombia, en uno de los momentos más dramáticos y decisivos de la historia política del continente.
La Gran Colombia (que abarcaba los territorios de lo que hoy son Colombia, Venezuela, Ecuador y Panamá) atravesaba una profunda crisis política y social. Los ideales de unidad que Bolívar había promovido estaban siendo desafiados por fuertes tensiones regionalistas, enfrentamientos civiles y una creciente oposición a su figura, a la que algunos veían como autoritaria. Tras años de conflictos internos, varios sectores políticos y militares presionaban por una descentralización o directamente por la disolución del Estado.
Motivos de la renuncia:
- Pérdida de apoyo político: Muchas regiones, como Venezuela y Quito, ya mostraban claros deseos de separarse.
- Enfermedad: Bolívar sufría de tuberculosis, lo que afectaba seriamente su capacidad física para gobernar.
- Desilusión personal: Bolívar se sentía traicionado por varios de sus antiguos aliados y decepcionado ante el fracaso de su proyecto de unidad continental.
- Violencia política: Meses antes, en septiembre de 1828, Bolívar sobrevivió a un intento de asesinato durante la llamada «Noche Septembrina» en Bogotá, lo que profundizó su sensación de inseguridad y descontento.
Consecuencias inmediatas:
- Tras su renuncia, Bolívar nombró como sucesor interino a Domingo Caicedo, aunque el país cayó rápidamente en más fragmentaciones.
- La Gran Colombia, debilitada, comenzó su desintegración definitiva. Venezuela y Ecuador se separaron poco después.
- Bolívar, enfermo y aislado, se retiró a Santa Marta, donde murió pocos meses después, el 17 de diciembre de 1830.
«He arado en el mar.»
Con esta frase, Bolívar resumió su amargo sentimiento de fracaso ante el desmoronamiento de su sueño de una América Latina unida.