Estudio recomienda cazar a los hipopótamos de Escobar ¿Qué va a pasar con su traslado?
Desde los años 80 cuando el narcotraficante Pablo Escobar importó en medio de sus excentricidades tres hipopótamos, dos hembras y un macho, estos no han parado de reproducirse, provocando un verdadero problema en el Magdalena Medio.
Estos animales han causado incidentes que han acabado con su vida como fue el caso ocurrido el pasado martes con un vehículo que se estrelló contra uno de los individuos.
Un estudio contratado por el Ministerio de Ambiente, y adelantado por el Instituto Humboldt y la Universidad Nacional, indica que estos animales deberían empezar a ser cazados.
El documento en el que se expone aquella hipótesis, realizado por 28 investigadores del Instituto Humboldt, el ICN de la Universidad Nacional y la Corporación Autónoma Regional de los ríos Negro y Nare (Cornare), detalla que dentro de las cinco labores de manejo, control y erradicación del hipopótamo en Colombia está la caza de control. Lo que se explica es que aquella acción puede ser física o química.
La primera de ellas incluye disparos o conmociones cerebrales, y la segunda con la inyección de fármacos. La caza de control, explica el documento de 170 páginas, sería la técnica de control más corta.
Al método de caza se suma el de translocación; confinamiento; alertas tempranas e intervención social. La que se menciona en la cabeza de la lista detalla que los animales pueden ser trasladados a zoológicos o ‘poblaciones silvestres en área de distribución nativa’, por ejemplo, África. El confinamiento, por el otro lado, se refiere al aislamiento de los animales a zonas en las que permanecerían por los años que les quedan de vida.
¿Y en qué quedó el proceso de traslado ?
A principios de este año, una de las alternativas para estos animales fue el trasladado hacia países como India y México. Este proceso que implicaría una logística nunca antes vista en Colombia, fue aprobada por la Gobernación. Sin embargo, hasta el momento este procedimiento está en stand by debido a que el Gobierno no ha dado la última palabra.
