Son varias las denuncias que han llegado hasta este medio de comunicación, donde los habitantes de La Ceja manifiestan que están cansados de la mendicidad, aduciendo que ya no es solo en los espacios públicos, si no también en las propias viviendas a donde han llegado a tocar la puerta pidiendo limosna hasta cinco veces en el día.
Jesús Londoño, habitante cejeño, narró que, en el parque principal y en algunas zonas con alto flujo de personas como la Central Integradora de Transportes, las iglesias y los puntos semafóricos, se ubican individuos que no son residentes de La Ceja a pedir limosna cualquier día de la semana, pero preferiblemente sábados y domingos, «Ese tipo de personas generan mucha inseguridad y cada vez se nota que son más pidiendo limosna, cosa que antes no se veía en tan grandes proporciones en La Ceja», indicó el ciudadano.
En otros sectores, las quejas surgen en torno al llamado de quienes ejercen la mendicidad a la puerta, algunos afirman que en sus viviendas pueden tocar en un día hasta cinco veces y que muchas veces se enojan si no les entregan una moneda o parte de su mercado.
«Yo la verdad estoy cansada de ver constantemente personas extrañas merodeando el barrio, a uno le da mucho miedo porque ya no se puede estar tranquilo, si no es pidiendo limosna, pasan como mirando qué pueden robar y eso no genera nada de seguridad», denunció ante EntreCejayCeja otra ciudadana, quien pidió que no publicáramos su nombre.
Las denuncias son sentidas entre la población que, a modo de secreto a voces, piden una intervención pronta de las autoridades para que la percepción de seguridad mejore y «No se nos dañe el pueblito que ha estado muy tranquilo», como manifestó otro cejeño inconforme con el aumento de la mendicidad en La Ceja.
