
La Gobernación de Antioquia, la Alcaldía de La Ceja y Empresas Públicas de La Ceja (EEPP) pusieron en funcionamiento la Planta de Tratamiento de Agua Potable (PTAP) La Uchuvala, ubicada en la zona oriental del municipio, con una inversión que supera los $5.685 millones de pesos. Esta obra garantiza agua potable para 80 familias de la vereda Las Lomitas y para 3.000 nuevos suscriptores, fortaleciendo la cobertura del servicio y marcando un hito en la sostenibilidad del territorio.
La alcaldesa Ilbed Santa destacó que “esta nueva planta permite que las familias de Las Lomitas, que antes dependían de carrotanques, ahora accedan a agua potable de calidad, especialmente en épocas de calor y escasez”. La Uchuvala se convierte en la cuarta planta operativa del municipio, sumándose a Fátima, Milagrosa y Palo Santo, con lo que La Ceja se posiciona como uno de los municipios del país con mayor capacidad instalada para el tratamiento de agua.

Un sistema robusto y sostenible
La Planta La Uchuvala operará con cuatro concesiones de agua: La Peña, La Selva, La Sagrada y La Uchuvala, que en conjunto aportan 17.5 litros por segundo. Esta capacidad se integrará al circuito general de plantas del municipio, alcanzando un total de 264 litros por segundo de agua concesionada, lo que permitirá una distribución más equilibrada y reducirá la presión sobre la planta Fátima.
Andrés Felipe Álvarez, gerente de EEPP La Ceja, subrayó que “este logro demuestra el compromiso del municipio con un desarrollo planificado y centrado en el bienestar de las personas”. La nueva PTAP no solo responde a los retos urbanísticos, sino que fortalece la capacidad de respuesta ante el crecimiento poblacional.
Agua de calidad y compromiso con la sostenibilidad
De acuerdo con cifras de la Superintendencia de Servicios Públicos, en Colombia solo 575 municipios tienen agua apta para consumo humano. Sin embargo, La Ceja registra un IRCA (Índice de Riesgo de la Calidad del Agua) del 0%, destacándose como referente en calidad del servicio.
La alcaldesa Ilbed Santa concluyó que “esta planta es una inversión para el presente y el futuro de La Ceja. Garantizar agua potable de calidad es cuidar la salud, la sostenibilidad y la vida de nuestra comunidad”. Además, recordó que La Ceja cuenta con programas sociales como el Mínimo Vital de Agua, que beneficia a 1.400 familias vulnerables cada mes.