Fue atropellada y ahora busca una segunda oportunidad; una historia de superación canina

Hace aproximadamente un mes dos perritas criollitas fueron abandonadas en inmediaciones de la autopista Medellín – Bogotá, sin entender por qué sus cuidadores las habían dejado allí, en una fría y lluviosa noche como esa, comenzaron a divagar por la carretera.

Los carros pasaban a toda velocidad y las perritas asustadas y desorientadas no sabían que camino tomar, la sed y el hambre las llevo a intentar cruzar en repetidas ocasiones la concurrida autopista. En su ultimo intento una de ellas logro llegar a la otra orilla, sin embargo su hermanita fue atropellada por un carro.

La perrita herida y con su cadera muy lastimada se arrastró hasta la orilla, juntas esperaron largo rato, hasta que un alma caritativa las observó y dio aviso al albergue del municipio de Marinilla, minutos después funcionarios de este se desplazaron hasta el lugar para auxiliarlas.

Una vez en el albergue, se les dio de comer a ambas y la perrita herida fue atendida, sin embargo, como era de esperarse tenia una fractura en la cadera y necesitaba un operación.

Desde entonces se arrastró sobre su cadera, recorriendo el lugar, mirando tiernamente y saludando con euforia a todo aquel que visita que visitaba el albergue.

Hace poco mas de una semana, don Ramon, el veterinario del centro recibió una llamada donde se le informó que alguien conmovido por la situación de la perrita se ofreció a costear la cirugía, sin embargo, el diagnostico pre quirúrgico le recomendaron que en vez de la operación, sometieran a la perrita a un ciclo de fisioterapias que le ayudara a volver a caminar.

hoy, la perrita se encuentra recuperándose satisfactoriamente, la vida le ha regalado una nueva oportunidad para ser feliz, ahora lo único que le falta es una familia que la adopte y le brinde todo el amor del mundo que esta luchadora se merece.